Els mongets, una comida típica de la zona
Conoces els mongets?
Un "Monget" es, a parte del nombre de un municipio de 80 habitantes del Pirineo atlántico francés, una de las variedades agrícolas más queridas en el Empordà. Al menos en nuestra casa es quien encabeza el top ten de las leguminosas y sin desmerecer los demás legumbres podemos certificar que, como mínimo, hace más de 70 años y tres generaciones que se cultiva de manera inintermitente.
Apreciados por su textura fina y su fácil digestión son habitualmente consumidos cocidos o acompañados de patata o todo tipo de carnes con un chorro de aceite de oliva o alioli. También se pueden comer las vainas verdes como si fueran judías verdes. Hasta la gastronomía más contemporánea, que ha explotado, también, sus aplicaciones ideales en preparaciones de hummus.
Sus características hacen que cosechados a mano y con una mecanización prácticamente inexistente, su producción sea principalmente a pequeña escala. El hecho de que las vainas se hayan de recoger a medida que se va secando la semilla y no todas de golpe, como de otras legumbres, lo convierte en un fruto poco atractivo comercialmente. Se siembra alrededor del 15 de mayo (San Isidro) y se cosecha a finales de agosto, por mongets verdes de esclovellar, o en septiembre, si es para consumir en seco.
El monget es, como la gamba de Palamós, la cebolla de Figueres o el arroz de Pals, uno de los 8 productos incluidos en la marca de garantía "Productos del Empordà" un certificado creado en septiembre de 2003. El reconocimiento se hacer con el objetivo de reconocer los productos propios del Empordà y ayudar a promocionar su comercialización con el apoyo de los productores y los consejos comarcales del Alt y Baix Empordà.
Un buen consejo para probar els mongets es sin duda hacer las maletas y venir a pasar unos días en el Empordà, donde se puede ver de primera mano como el cultivan productores locales, como nosotros, y adquirirlo en tiendas especializadas, ferias y mercados semanales. Con un poco de suerte, también es un gozo saborearlos cocinados por un restaurante de la zona bien maridados con un buen vino.
Como la mayoría de productos locales que nos rodean sus destinos están llenos de historia y, a pesar de tener un consumo arraigado en el Empordà, sus orígenes se remontan a África donde fueron los romanos quienes los llevaron a casa nuestra por primera vez.
El monget también es conocido en otras zonas como "habichuelas del ojo marrón", judía bañolense, "caragirats" o "escurçatites". Y sobre todo, no hay que confundirlo nunca con el monget de ojo negro, más fácil de encontrar, más económico y menos apreciado en la cocina. Por todo ello, y seguramente más que nos dejamos, siempre que en casa comemos mongets, que por suerte es bastante a menudo, decimos que hacemos "comida de fiesta mayor".